Debido a que la Academia Nacional de Formación y Desarrollo Policial “General Ignacio Zaragoza” se sostiene con recursos estatales, no existe riesgo de que cierre sus puertas ante versiones que han dado cuenta de ello, aclaró la rectora María de Lourdes Rosales Martínez.
Sin embargo, en entrevista con CAMBIO reconoció que por la mala relación que existe entre el gobierno de Estados Unidos y México, hay riesgo de que el país vecino cancele la colaboración que existe en la capacitación que brindan agentes de la Administración para el Control de Drogas (DEA) y de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) –por sus siglas en inglés– a policías mexicanos.
“Pensar en un cierre es totalmente absurdo (…) la Academia recibió un donativo de Iniciativa Mérida en un primer año. El cual fue en especie y es un donativo precisamente del equipamiento con el que nosotros contamos, después recibe otro donativo más en la instrucción del cuerpo táctico”, recordó.
Reconoció que la colaboración que tuvo Estados Unidos en 2012 cuando se inauguró este centro fue importante pero dejó en claro que el proyecto se ha consolidado con dinero propio. Fue en el marco del 150 aniversario de la Batalla de Puebla cuando el gobierno de Rafael Moreno Valle inauguró dicho centro cuya inversión ascendió a 300 millones de pesos, de los cuales, 5 millones de dólares fueron aportados por la Iniciativa Mérida.
La misma en la que fue incluido este centro, establecido por Estados Unidos en acuerdo con México y los países de Centroamérica, que consiste en aportar recursos para combatir el narcotráfico.
“Nunca hemos dependido de Estados Unidos”
Con el encabezado “Cierra la Academia de Policía “Ignacio Zaragoza” en Puebla; EU deja de enviar dinero”, la Jornada de Oriente en su edición del 10 de abril señaló que la Academia había cerrado sus puertas. CAMBIO verificó el mismo día la información en un recorrido en las instalaciones y en entrevista con la rectora, quien se mofó de la publicación ya que dijo que policías de todo el país se capacitan en este espacio.
“Nunca hemos dependido de recursos (de Estados Unidos) que no sean los recursos propios de la academia (…) Tenemos diferentes formas de acceder a ellos, tenemos vía Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública, tenemos vía los municipios que contratan la capacitación aquí”, explicó aunque evitó especificar la cantidad con la que cuenta este espacio cada año.
Admitió que desde 2012, instructores norteamericanos capacitan a policías poblanos y provenientes de otras partes del país. Dichas capacitaciones son especializadas, entre ellas las de cómo enfrentar una explosión. Especificó.
“Han venido de la DEA de la Policía de Fronteras, de la CIA, de varias dependencias norteamericanas”.
En esta semana inició una nueva capacitación en esta academia y la rectora aseguró que en cada una no hay menos de 600 personas y se han graduado dos generaciones de bachillerato, es decir, jóvenes que ingresan con el objetivo de convertirse en policías.