Al presentar el portal oraculus.mx en el noticiero Despierta con Loret, el politólogo Leo Zuckerman afirmó que el modelo de poll de polls señala la probabilidad de 99.9 por ciento del triunfo de Andrés Manuel López Obrador…. si se llevaran a cabo las elecciones este día y que Meade y Anaya se disputan el tercer lugar en un empate técnico. Es decir, a menos de seis meses de los comicios federales, el tabasqueño es el rival a vencer y en los meses por venir, entre PRI y Frente tendrán que tirarse cuchilladas para que uno de ellos se convierta en el otro finalista.
Esa probabilidad de triunfo pejista del 99.9 por ciento conforme avancen los meses puede elevarse a 99.9999999 por ciento con consecuencias importantes para los poblanos. La principal, es que hasta el último segundo de la elección, Luis Miguel Barbosa tendrá la oportunidad de llegar a Casa Puebla y vencer al morenovallismo impulsado por lo que algunos calculan puede convertirse en un tsunami similar al de Vicente Fox en el 2000.
No existen antecedentes electorales para validar esa hipótesis puesto que, por primera vez, en 2018 concurrirán la elección federal con la local. En el 2000 sólo hubo elección federal y el fenómeno del cambio se impuso con 732 mil votos, la mitad prácticamente obtenidos en la capital. De hecho, Fox es históricamente el candidato más votado en la Angelópolis, pues desde ese año nadie lo ha podido superar y el más cercano fue Eduardo Rivera con sus 300 mil votos en 2010.
López Obrador ya ganó la elección presidencial en Puebla en 2006 y 2012. Aunque no llegó a Los Pinos, Puebla es uno de sus principales bastiones y el fenómeno va in crescendo de acuerdo con las más recientes encuestas. La de Mas Data, presentada a finales de año pasado en este diario, reveló que López Obrador va a arrasar pues le saca 2 a 1 a Meade y más de ocho puntos a Anaya.
¿Cuántos votos va a obtener el tabasqueño en Puebla, tomando en cuenta una participación ciudadana de 62 por ciento? Por lo menos un millón que fácilmente pueden dispararse a un millón 200 mil votos. ¿Y de esos votos cuántos van a apostar por Luis Miguel Barbosa?
La franja entre ambos es de 200 a 350 mil votos, por lo que la contienda por Casa Puebla está abierta. Me explico: no todos los que quieren votar por López Obrador van a hacerlo en automático por Barbosa. Pero si el mero día de la jornada electoral los poblanos decidieran apostar a Morena en todas las papeletas, que no hubiera voto diferenciado, el senador oriundo de Tehuacán puede superar fácilmente a Martha Erika Alonso o a cualquier candidato del morenovallismo?
¿De qué dependerá?
Uno, que la coalición total firmada con PT y PES funcione más que en potencial electoral, en defensa del voto. Es decir, que todas las casillas puedan ser cubiertas con representantes. Dos, de la estructura regional que puedan aportar los ex priistas Alejandro Armenta y Nancy de la Sierra. Tres, del tamaño del desfonde del PRI, pues entre más se acerque el momento de la verdad, las estructuras tricolores buscarán acercarse al bando ganador.
En el futbol americano se le llama Hail Mary pass al lanzamiento de último minuto a la zona de anotación para tratar de ganar a la desesperada un partido. A veces sale, a veces no. Y así pasará Barbosa prácticamente todo el proceso electoral: abajo en las encuestas, pero esperando encontrarse el balón en la zona de anotación para rebasar en el último minuto a la estructura morenovallista.
Al final, la proximidad del poder, la posibilidad de ganar, provocó que en Morena todos cerraran filas alrededor de Luis Miguel Barbosa que afina la campaña mediática, más que contra Marta Erika, que disparará directamente sobre Moreno Valle. El disenso interno en el partido del tabasqueño se apaciguó y ahora ya sólo se espera la nominación de la candidata a la alcaldía, la última pieza que hace falta en el rompecabezas.
Una larga y tensa espera en la zona de anotación para atrapar el balón que le lance López Obrador. Mientras, todos contenemos el aliento para ver si lo captura o no.