Lobos BUAP apenas cumple con el requisito de la Federación Mexicana de Futbol acerca de la capacidad de 20 mil aficionados, ya que el Estadio Olímpico de la BUAP está diseñado para 21 mil personas.
Alfonso Esparza Ortiz, rector de la BUAP, se encuentra trabajando para el siguiente compromiso de Lobos BUAP en Primera División, en el que afirmó después del Ascenso frente a Dorados, se realizarían las adecuaciones al inmueble para llegar a la Liga MX en las mejores condiciones.
De acuerdo con el reglamento de la Federación Mexicana de Futbol, en el artículo 60, sección 4 del Reglamento de Competencia en Primera División Profesional, se establece que un estadio de cualquier equipo de la Liga MX debe tener mínimo 20 mil lugares.
“Contar con un aforo de 20,000 personas como mínimo, salvo los Clubes que ya integran la División”.
Aunque el estadio Olímpico se convertirá en el más pequeño de la Liga MX, por debajo del estadio Victoria de Necaxa, con capacidad de 26 mil aficionados; el inmueble cuenta con los servicios de seguridad, rampas, accesos, asientos y personal para su administración.
De esta forma, los licántropos podrán continuar jugando en su estadio, que se especuló podrían dejar para emigrar al Cuauhtémoc en caso de que los camoteros descendieran, aunque no fue así ya que Puebla se mantendrá en la ciudad.
El estadio Olímpico Universitario de la BUAP fue retomado en su remodelación en el 2011, éste ya existía aunque por falta de recursos se dejó tal cual por años; así, fue inaugurado en el 2012 con inversión de la Universidad y del gobierno estatal por 380 millones de pesos; que le dieron a Lobos uno de los mejores estadios del Ascenso MX.
Así, Lobos BUAP tendrá casa avalada por la Federación Mexicana de Futbol para participar en lo que será su debut en Primera División, esperando contar con la gente que los apoyó durante el Clausura 2017.