Miguel Ángel Yunes ya es oficialmente gobernador electo de Veracruz y está a menos de dos meses de tomar protesta, momento en el que hará revelaciones sobre Javier Duarte que “sacudirán a todo México”. Lo dijo luego que el priista presentó su licencia y lo retó a debatir en la pantalla de Televisa, y Yunes se negó aduciendo que había una conspiración para impedirle asumir la gubernatura. Pero la Sala Superior del TEPJF avaló ayer su triunfo y ahora Yunes tiene el todo el escenario para hacer sus revelaciones que “sacudirán a todo México”.
¿Qué puede revelar Yunes para “sacudir a todo México”? Los rumorólogos afirman que se trata del dinero público que salió de Veracruz para pagar la campaña de Enrique Peña Nieto en 2012 y se regó en varios estados del país.
Por supuesto, eso nos lleva a recordar que el PRI de Puebla vivió del dinero de Javier Duarte entre 2011 y 2013. El gobernador de Veracruz recibió el encargo de mantener vivo al partidazo tras la derrota de Javier López Zavala a fin de que la estructura tricolor impidiera que el lopezobradorismo arrasara el estado.
Para operar esa manutención, el ahora góber caído envió a la entidad en calidad de delegado general del partido a uno de sus personajes más adictos, quien mes con mes viajaba del Puerto a la Angelópolis con maletas llenas de dinero, más de 2 millones de pesos al mes. Los pasos de Javier Duarte en Puebla son muy conocidos a partir del 2011, cuando se convirtió en el pater familia financiero del PRI huérfano de liderazgo —y recursos económicos— tras la toma de protesta de Rafael Moreno Valle.
Para hacer más eficiente la Operación Maleta, Javier Duarte nombró delegado del tricolor a un operador electoral de su extrema confianza, Ranulfo Márquez, quien permaneció en esa posición del 31 de marzo del 2011 al 21 de marzo del 2012, cuando fue destituido por Pedro Joaquín Coldwell luego de las pruebas que aportó CAMBIO para demostrar que el veracruzano se dedicó a la venta de candidaturas durante su paso por Puebla.
El jarocho Ranulfo Márquez, en su paso como delegado de Puebla, coincidió con Juan Carlos Lastiri como dirigente estatal. Ambos condujeron el efervescente proceso de designación de candidatos en 2012 y se dice que el zacatleco siempre estuvo al tanto de los negocios del enviado de Javier Duarte, pero se vio obligado a guardar silencio para no poner en riesgo la manutención de 2 millones de pesos anuales que enviaba el gobernador Duarte a Puebla.
Ranulfo Márquez fue destituido como delegado del PRI en Puebla bajo el escándalo de venta de candidaturas, aunque luego fue designado delegado de Sedesol en su estado, destituido por el escándalo “no te preocupes Rosario” y luego nombrado por Duarte al frente de la Sedesol de ese estado. A ese nivel la confianza.
El dinero veracruzano en maletas alimentó al PRI de todo el país entre 2011 y 2012, ya que Javier Duarte fue el principal financiero de la campaña presidencial con la anuencia de otro gran corrupto tricolor, Humberto Moreira, entonces dirigente nacional. Todavía se recuerda el episodio cuando el 27 de enero de 2012 dos empleados del gobierno de Veracruz fueron detenidos en el aeropuerto de Toluca con 25 millones de pesos en efectivo que llevaban en dos maletas. Los dos empleados llevaban un oficio de la tesorería del estado para justificar la presencia del dinero, pero no su origen ni su destino.
Para cubrir el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita, el gobierno de Veracruz se inventó que el dinero en efectivo tenía por objeto pagar a las casas productoras que había organizado la Cumbre Tajín de ese año. Desde Los Pinos se dio la orden de dar por cerrado el asunto, ya que Felipe Calderón ya había pactado con el PRI para impedir la victoria de López Obrador.
Gracias a su papel de financiero de la campaña presidencial del PRI, así como del tricolor en varios estados donde se encontraban en orfandad, fue que Javier Duarte se convirtió en un emblema del PRI, ejemplo de la nueva camada tricolor, y ese gran poder que adquirió con el dinero de los veracruzanos lo volvió loco. Del cielo al infierno, gozó de la protección presidencial hasta que su propia locura lo llevó a cometer el peor delito que se puede cometer en la política: entregar el poder a tu oposición. Y no a cualquier oposición, sino a un enemigo personal como es Miguel Ángel Yunes.
¿Va a exhibir el nuevo gobernador de Veracruz cómo su antecesor despilfarró el presupuesto de su estado no sólo en enriquecerse personalmente, sino en financiar a su partido, tanto a nivel de elección presidencial como en los estados? ¿Las fobias de Yunes contra Moreno Valle lo van a hacer exhibir algo relacionado con Puebla? ¿Hay pruebas del dinero que mes a mes, en maletas, hacía llegar al PRI poblano de Juan Carlos Lastiri vía Ranulfo Márquez? ¿Cuántos cosas tiene esa Caja de Pandora?