Sunday, 19 de May de 2024


Juárez y Vasconcelos se volverían a morir




Written by 

Ayer por la mañana, la frase inmortal de Benito Juárez sonó con más fuerza en suelo Oaxaqueño a medida que un grupo de docentes afiliados a la CNTE  empujó e impidió al presidente de Mexicanos Primero, Claudio X. González,  presentar los resultados del IDEI en un foro con medios de comunicación organizado para este fin.

 

Ayer por la mañana, la frase inmortal de Benito Juárez sonó con más fuerza en suelo Oaxaqueño a medida que un grupo de docentes afiliados a la CNTE —en su mayoría mujeres, en una estrategia planeada para provocar una reacción basada en su condición de género— empujó e impidió al presidente de Mexicanos Primero, Claudio X. González, y a su director general, David Calderón, ejercer su derecho a la libertad de expresión y presentar los resultados del Índice de Desempeño Educativo Incluyente (IDEI) en un foro con medios de comunicación organizado para este fin. Las maestras evitaban con sus puños levantados que Mexicanos Primero diera a conocer los resultados que muestran a su estado en el fondo de la tabla del ranking educativo nacional, ocupando los lugares 31 en primaria y —como los olmos no dan peras— el 31 en secundaria.

 

 

¿Cuál es el otro lado de la misma moneda? Nuevamente, el caluroso pero pujante estado de Sonora. Para entender mejor la grave situación en que se encuentra Oaxaca y llevarlo a los números siempre fríos pero necesarios, es importante revisar lo siguiente: mientras en Sonora menos del 5 por ciento del PIB se aporta a través de los servicios educativos, en Oaxaca esta cifra se eleva al 10 por ciento, o en términos llanos, el doble. De igual forma, la aportación a través del sector público al PIB en Oaxaca es del 7 por ciento mientras que en Sonora es menos del 4 por ciento, o para fines prácticos, la mitad. Hablando claro y en resumen, con los impuestos de todos los mexicanos, el gobierno subsidia el 20 por ciento de la actividad económica de nuestro estado vecino. La razón de esto es muy sencilla, el estado de Oaxaca no produce por sí mismo los recursos necesarios para crear las fuentes de empleo que su población necesita. Mientras Oaxaca aporta el 1.6 del PIB nacional, Sonora se va a casi el doble en su aportación con un millón de habitantes menos.

 

 

Todos conocemos o tenemos amigos oaxaqueños muy queridos que han tenido que dejar su hermosa tierra con el fin de encontrar las oportunidades que no tienen en su estado. Personas valiosísimas que se abren paso con gran dignidad a dondequiera que van, pero que dejan atrás un vacío productivo irremplazable. Muchos dirán que la razón principal del atraso que vive Oaxaca se debe a su diversidad cultural y topográfica o al desdén que los gobiernos centrales han tenido de ellos (tesis que se rompe cuando vemos el grado de participación en la economía oaxaqueña que tienen los recursos públicos). Sin embargo, todo esto no explica cómo un estado que recibe cada año un presupuesto de la Federación muy semejante al de Puebla, se encuentra en la situación en la que está, especialmente cuando nuestro estado tiene muchos mejores resultados educativos en condiciones muy similares. Si por nuestra raza hablara nuestro espíritu, seguramente nos diría que el rumbo que ha seguido Oaxaca en su educación es el incorrecto, especialmente si el gran maestro por excelencia, José Vasconcelos, viera los resultados obtenidos.

 

 

Una de las principales respuestas a este fenómeno yace sencillamente en eso, en la calidad de la educación en Oaxaca y el papel que ha jugado la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en su falla sistémica.

 

 

Para pocos es conocido que de manera legal la CNTE tiene un asiento en la junta de gobierno del IEEPO (Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca, el equivalente a la SEP del estado) y que tienen voz y voto en los nombramientos de directivos no sólo de las escuelas sino en la estructura misma del instituto (un sueño de muchos sindicalistas), convirtiéndose en juez y parte en una convivencia que deja totalmente aislada cualquier iniciativa de cambio y mejora. Los intentos por evaluar el sistema educativo son frenados, y cuando hay una amenaza al imperio de poder que la CNTE ha mantenido, la respuesta inmediata es cerrar calles y dejar a nuestros queridos niños sin clases, enviándolos aún más lejos de la tabla de posibilidades de una vida mejor y, como bien lo ha dicho David Calderón, ignorando completamente sus derechos fundamentales. Otra gran diferencia con Sonora, donde la evaluación educativa es algo común desde hace más de 10 años, haciendo para tristeza de todos que la brecha de la desigualdad siga creciendo.

 

 

El hecho de que todos califiquemos la educación que recibimos es inalienable y no puede ser removido por la fuerza sino comprendido a través de la razón. El que cada actor haga su parte de manera responsable es el camino del progreso y el bienestar. Nadie, llámese sociedad civil, gobierno, sindicatos, alumnos o padres de familia, tiene el conocimiento ni la responsabilidad absoluta en las respuestas y acciones que se necesitan para lograr la mejor calidad educativa posible.

 

 

Parafraseando a Porfirio Díaz, otro personaje famoso de aquellos rumbos, pobre Oaxaca, tan lejos de Dios y tan cerca de la CNTE.

 

 

Rate this item
(0 votes)
comments powered by Disqus