El presidente de Audi de México, Alfons Dintner reconoció que la firma ha contratado a 500 alemanes y un indeterminado número de extranjeros procedentes de Argentina y Brasil que colaboran en la capacitación del personal que laborará en la planta de San José Chiapa, por lo que una vez que concluyan su misión regresarán a sus países de origen.

“Tenemos 500 empleados alemanes que vienen de los emplazamientos europeos solamente para apoyar, y también colegas de Argentina y Brasil abundan temporalmente para arrancar los procesos de producción pero es temporal, van a regresar a sus países de origen”, explicó en rueda de prensa, tras inaugurar la armadora.

CAMBIO publicó la semana pasada que en la planta hay 900 trabajadores extranjeros y que muchos de ellos entraron a México con una situación migratoria irregular como turistas.

El ejecutivo alemán evitó responder si por la colocación de empleados extranjeros en fuentes de trabajo pensadas para los mexicanos, Audi tendría que cumplir con el pago de 55 mil dólares por cada empleo no generado según los acuerdos entre la automotriz y el Gobierno del Estado.

Es preciso señalar que después del Dieselgate, Moreno Valle aseveró que la empresa estaba obligada a cumplir con los cuatro mil 200 empleos prometidos para la operación de su planta armadora en Puebla, ya que de lo contrario se haría acreedora a una penalización de 55 mil dólares por cada plaza laboral no generada.

Sobre las denuncias hechas por trabajadores respecto de que Audi de México no está reportando accidentes de trabajo en su planta de San José Chiapa para que su prima de riesgo no se eleve y las cuotas que pagan no se incrementen, Alfons Dintner desmintió las revelaciones anónimas realizadas por los obreros previo a la inauguración de la firma.

“En cuanto a las denuncias de los accidentes, trabajamos en conjunto con las autoridades, no existen estos accidentes y si vieron los informes se penalizó a los proveedores de la planta en los que hubo irregularidades, pero ninguno de estos casos es conocido para nosotros como ocurrido al interior de la armadora”, aseveró.

En la queja por escrito que obra en poder de CAMBIO y que va dirigida al delegado del IMSS en Puebla, Enrique Doger Guerrero, así como a la delegación federal de la Secretaría del Trabajo, los empleados también confesaron que ante eventualidades son atendidos por los servicios médicos internos de la empresa.