La malograda candidata del PRI a la minigubernatura, Blanca Alcalá Ruiz ejecutó su venganza en contra del morenovallismo mediante su posición en el Senado de la República, al sugerir que las autoridades locales fueron negligentes frente a la amenaza que la tormenta Earlrepresentaba para las comunidades de la Sierra Norte del estado.
A través de un punto de acuerdo firmado por ella y por los diputados federales del PRI: Xitlalic Ceja, Alejandro Armenta, Víctor Giorgana, Lorenzo Rivera, Jorge Estefan Chidiac, Carlos Barragán y Hersilia Córdova, la tricolor exigió una investigación de las acciones emprendidas por las autoridades previo al siniestro, y a la Secretaría General de Gobierno (SGG) del estado un informe detallado respecto a las medidas instrumentadas frente a fenómenos naturales.
“Las autoridades correspondientes deben investigar si existieron negligencias por parte de las autoridades locales que, por acción u omisión, derivaron en la falta de información a la ciudadanía, que de haberse dado a conocer se hubieran prevenido la pérdida de bienes y lo más importante, evitado pérdidas humanas”, cita el oficio que ingresó en sesión de la comisión Permanente del Congreso de la Unión.
Basada en cifras oficiales, Alcalá Ruizreportó al momento mil 600 viviendas afectadas tras el desgajamiento de cerros que originaron 22 aludes, de las cuales una tercera parte corresponde al patrimonio de familias del municipio de Huauchinango.
“Lamentablemente, el pasado 5 y 6 de agosto, junto con Tlaola, Xicotepec, Naupan, Pahuatlán y Chiconcuautla se vieron afectados por el huracán ‘Earl’ y la tormenta tropical ‘Javier’. Según datos de la Comisión Nacional del Agua ha sidola mayor precipitación de la que se tenga registro, 265.5 mm acumulados durante 24 horas, lo que significa casi la totalidad de precipitaciones en todo un mes, convirtiéndose en el temporal más mortífero en el país en tres años”.
En este sentido, urgió que inicien los trabajos de reconstrucción de viviendas en apego a lo establecido en el Atlas de Riesgo, para que los nuevos hogares de las familias damnificadas se edifiquen en superficies idóneas y no en zonas vulnerables a distintos siniestros.
Además, exhortó a la Secretaría de Hacienda que a través de la Dirección General del Servicio de Administración y Enajenación de Bienes apoye con donaciones de bienes en su poder a los municipios que fueron afectados tales como ropa, cobijas y calzado decomisado.