Al menos 68 presuntos ladrones, violadores, extorsionadores y hasta secuestradores han sido objeto de turbas iracundas que han buscado hacer justicia por propia mano ante la pasividad de las autoridades en sus municipios, esto en al menos 40 linchamientos en lo que va del año, entre los que se registraron siete delincuentes muertos.
Dichos casos documentados por CAMBIO se distribuyeron en 22 municipios poblanos, siendo Chichiquila, Chapulco, Acatlán de Osorio, Cuapiaxtla de Madero, Quimixtlán y Puebla donde se registraron los decesos de estos presuntos delincuentes.
Ni los secuestradores se salvan
Uno de los hechos más impactantes este año es el de dos presuntos secuestradores que fueron linchados por vecinos de la localidad de Tepehuacan perteneciente al municipio de Chichiquila, los cuales presuntamente pedían 4 millones de pesos para liberar a dos menores de edad que habían secuestrado, aunque finalmente sólo cobraron 24 mil pesos.
Aunque las autoridades municipales intentaron montar un operativo para rescatar a los menores y liberar a los plagiarios, dos de ellos lograron escapar de los uniformados, pero no de los pobladores, quienes los maniataron de pies y manos, provocándoles la muerte, infringirles heridas por arma de fuego, amén de algunos machetazos.
A golpes y quemados fueron castigados los delincuentes
El primer linchamiento del año que cobra la vida de una persona acusada de cometer un delito tuvo lugar en Acatlán de Osorio donde el pasado 27 de enero una muchedumbre golpeó hasta la muerte a Víctor Manuel Alvarado, quien junto con tres sujetos más fue acusado por los vecinos del barrio de San Cristóbal de asaltar una vivienda y dispararle al dueño.
Un mes después, el 29 de febrero, vecinos del municipio de Chapulco sorprendieron a cinco sujetos robando ganado y dinero en efectivo de una propiedad, por lo que tras organizarse detuvieron a cinco personas de las cuales una falleció a golpes y dos más terminaron con graves lesiones al no poder huir de los colonos.
La madrugada del 9 de agosto se decretó la muerte de Arturo G., un presunto delincuente que un día antes fue detenido junto con otros dos sujetos cuando vecinos de Cuapiaxtla de Madero los sorprendieron robando una camioneta. A pesar de ir armados, los pobladores lograron someterlos y provocarles lesiones mortales.
Otro presunto ladrón de ganado está entre los finados en el linchamiento del 2016, el cual intentó robar ganado junto con dos sujetos más, pero al verse sorprendido intentó huir aunque no corrió con la suerte de sus compañeros y fue detenido por la horda de vecinos, quien lo ató a un árbol para luego quemarlo vivo.
Linchamientos alcanzan a la capital poblana
La capital poblana tampoco ha estado exenta de los linchamientos y es que apenas el pasado jueves tres de octubre, vecinos de la colonia Lomas de San Miguel emboscaron a cuatro jóvenes que presuntamente habían “picado” con un arma a otro chico de la misma zona, el cual se había negado a “darles para su calaverita”.
A pesar de atrincherarse por casi tres horas en una vivienda, los colonos enardecidos intentaron quemar la casa para obligarlos a salir, aunque finalmente fue la madre de uno de los acusados quien entregó a dos de ellos a la Policía, mientras que el otro par quiso evadir a las autoridades, pero no lo lograron con los vecinos quienes le propinaron una brutal golpiza.
24 horas después de la agresión, uno de ellos murió en una cama del hospital general del sur, mientras que su compañero permanece internado con un cuadro clínico reservado.
También en la capital, el pasado jueves un ladrón de celulares fue detenido por padres de familia del Centro Escolar Niños Héroes de Chapultepec (Cenhch) y aunque actualmente enfrenta un proceso por robo común, su detención permitió que su ex pareja lo denunciara por agresiones, ya que unas horas antes, estando ebrio la golpeó.