Arne aus den Ruthen Haag recorría Paseo de la Reforma y encontró en el número 835 de esa avenida, 4 vehículos con dispositivos luminosos de uso exclusivo de patrullas y ambulancias, sin placas y estacionados sobre la banqueta.
El funcionario solicitó a los agentes de tránsito que llamaran a una grúa y levantaran las infracciones correspondientes. En el lugar estaban los escoltas del empresario, quienes pagaron la multa y pidieron que no se llevaran los autos al corralón como “favor”, prometiendo que no volverían a estacionar los coches en ese lugar.
Ruthen Haag, se negó y los escoltas, después de intentar intimidarlo, llamaron al empresario y lo pusieron en altavoz con el empresario, que se dedicó a insultar al funcionario diciéndole “Me pelas la ver#$%#%” pinche hipioso de mierda”.