El vicepresidente de Relaciones Corporativas y Estrategias de Volkswagen, Thomas Karig rechazó que la suspensión de labores en Volkswagen programada para el periodo del 19 de diciembre al 8 de enero de 2016, sea una afectación del Dieselgate, ya que es un paro programado en el calendario de producción.

En entrevista para Oro Noticias, el directivo insistió en que las afectaciones por la estafa internacional desatada en Estados Unidos se reflejarán el próximo año, pero con el proyecto de la producción de la Tiguan se podrá mantener la estabilidad laboral.

Recientemente, las proveedoras de la empresa germana revelaron que las cuatro semanas de diciembre y las dos primeras de enero se daría un paro técnico en Volkswagen, lo cual fue desmentido por Karig, como previamente ya lo había realizado el sindicato de la empresa.

“Lo próximo que viene para la planta de Puebla son las vacaciones de fin de año, que empiezan el 19 de diciembre y en la mayoría de los casos se van hasta el 8 de enero. Es un periodo sin producción que ya estaba acordado, desde el principio de año en el calendario, que esas dos semanas se iban a descansar”.

Por ello, afirmó que las proveedoras ya tenían conocimiento de la suspensión de las actividades de la planta de Cuautlancingo, por lo que tendrán que realizar los ajustes necesarios para enfrentar esta situación.

“No es normal que se detenga una planta, estoy de acuerdo, (pero) cada proveedor debe encontrar su propio esquema para afrontar este tipo de periodos, hay empresas que le surten a otras armadoras”, sostuvo.

Thomas Karig resaltó que en el mercado mexicano no se ha tenido un impacto por la crisis mundial, debido a que México no es un consumidor importante de autos diésel. Por ello expuso que el mercado interno creció 18 por ciento en octubre.