El escándalo internacional que enfrenta Volkswagen en Estados Unidos por disfrazar los niveles de contaminación de sus autos diésel, revela que los mexicanos no son los únicos corruptos en el mundo, sostuvo el rector de la Udlap, Luis Ernesto Dérbez Bautista, tras referir que la automotriz se ha convertido en una vergüenza nacional en Alemania.

En entrevista tras la inauguración del edificio El Patio de los Azulejos, el ex secretario de Economía en el sexenio de Vicente Fox, consideró que el impacto negativo en la planta de Puebla y su cadena de proveeduría será mínimo, pues tendrá que disminuir solamente la producción de autos diésel, la cual es menor en relación a la de unidades de gasolina.

“Es una vergüenza tan clara, que al director general lo acaban de obligar a que renuncie. La caída de la Bolsa representa el impacto que tendrá el problema para Volkswagen”.

Por ello, afirmó que entre las cosas positivas que deja el escándalo de Volkswagen, se encuentra la caída del mito que por aspectos culturales los mexicanos son corruptos y se evidencia que “todos somos iguales”.

“Van a perder mercado en Estados Unidos. Se lo merecen. Este es el ejemplo, claro de por qué se deben hacer las cosas bien y transparentes. Estos señores la hicieron mal y muy como los mexicanos. ¿Verdad que todos somos iguales en el mundo? ¿Qué, no es una cuestión cultural? ¿Verdad que no es cierto esta tontería que se dijo, de que era algo cultural la corrupción en el mexicano?

“Una compañía como Volkswagen nos manda un mensaje muy positivo a quienes tenemos este trauma de cultura de la corrupción en México. No es cierto, el problema son las instituciones. Si la institución me permite seguir impune lo sigo haciendo. De 2009 a 2015, el arreglo institucional que revisaba los autos me permitió salir impune, lo seguí haciendo. Me llamo Volkswagen, tengo nombre y apellido y alemán, pero además lo practico en Estados Unidos”, sostuvo Luis Ernesto Dérbez.