A los hogares y negocios de la zona metropolitana comenzaron a llegar las primeras boletas de pago del servicio de agua, drenaje y alcantarillado emitidas por la empresa Concesiones Integrales, apenas 11 días después de asumir el control del SOAPAP. En ellas, la empresa ganadora de la concesión por 30 años ya aplica las nuevas tarifas mensuales aprobadas por el Congreso local en marzo pasado con aumentos superiores al 40 por ciento.

Las nuevas boletas de pago contienen errores en los conceptos de cobro, y hasta ortográficos, además de un tono amenazante de la suspensión de los servicios en caso de tener adeudos. Incluso, en los usuarios de servicio medido, no contiene información del costo por metro cúbico del agua consumida de acuerdo al estrato socioeconómico. En el caso de las boletas de usuarios de servicio medido que no tienen medidor, hace un cálculo del agua consumida en el mes, además se presenta una falta de concordancia entre el total consumido en el periodo y el importe a pagar, como se demuestra en el documento presentado por CAMBIO.

En su prisa por emitir las boletas de pago, Concesiones Integrales no integró sus datos fiscales, ni puso a disposición de los usuarios algún número telefónico, dirección, o sitio web para emitir una queja en torno al cobro que les facturaron o consultar el estado de cuenta, y sólo se especifica que el depósito puede realizarse a través de sucursales bancarias o en las tiendas Oxxo, así como en el Centro Integral de Servicios (CIS).

En el reverso de la boleta de pago, Concesiones Integrales SA de CV aprovecha para presentarse formalmente como la empresa que gestionará “los servicios de agua potable, alcantarillado y saneamiento” y cuyo objetivo es “integrarnos a la Sociedad Poblana” (sic).

El grupo de empresas conformada por Aguas de México, Epcor y Ticsa no se anda por las ramas y advierte a los usuarios que “se podrán generar molestias” al realizar obras para cambiar redes y tomas de agua domésticas para la colocación de medidores para quienes todavía no los tienen.

Las prisas de Concesiones Integrales

De acuerdo a las boletas de pago que obran en poder de CAMBIO, se observa la urgencia de la empresa por comenzar a recuperar la inversión multimillonaria que pagaron al morenovallismo para hacerse de los servicios, pues aunque las nuevas tarifas entraron en vigor el 1 de mayo, y se especifica que son mensuales, la nueva empresa realizó la facturación el 27 de mayo, cuatro días antes de que concluyera el plazo.

Otro de los aspectos a destacar es que aunque se trata de un servicio fijo, se establece el uso de metros cúbicos facturados, pese a que la toma domiciliaria no cuenta con un medidor, ni se establece la lectura del consumo. La empresa establece que la notificación de pago no es un comprobante fiscal, debido a que carece de la acreditación del RFC.

En un texto de presentación publicado al reverso de la notificación de pago, Concesiones Integrales promete que habrá comunicación constante con los usuarios para “garantizar que las personas que trabajan con nosotros de manera directa e indirecta, se conduzcan con honorabilidad, decencia, prontitud, calidad, atención y en el marco de un sentido humano”.

El titular de la concesión que pagó al gobierno estatal una contraprestación por mil 400 millones de pesos, también explicó el procedimiento por el que ganó el proceso, con el inicio de la publicación de la convocatoria el 18 de septiembre de 2013, y posteriormente con el fallo el 26 de diciembre del mismo año, cuando se alzaron con la victoria tras una disputa que incluyó a otras 11 firmas especializadas.

Aunque el grupo de empresas aprovechó para presentarse ante los poblanos y anunciar que buscan “llegar a ser un organismo modelo respecto a la prestación de los servicios de agua potable”, el detalle de los conceptos de pago contiene errores tales como la diferencia entre el monto consumido y el total de pago, esto sin mencionar los innumerables yerros en ortografía y sintaxis.

Los detalles

Concesiones Integrales tomó posesión de los servicios del SOAPAP el 16 de mayo pasado, y cuatro días después recontrató al personal del organismo operador. De inmediato las empresas demostraron el control y 11 días posteriores comenzaron a enviar las notificaciones de pago, en las que se tienen advertencias agresivas de que el cobro será suspendido si no se saldan.

“El total a pagar NO libera al suscriptor o usuario de adeudos anteriores, gastos de cobranza y de notificación no considerada o por servicios no incluidos”, se lee en las letras pequeñas del recibo.

Cabe mencionar que la tarifa concuerda con lo establecido en el Congreso, pues en el caso que documenta esta casa editorial, la facturación corresponde a un domicilio clasificado en la zona 5 en la que se paga un consumo fijo por 508 mensuales.

Sin embargo, aunque el documento dice que no se tiene un adeudo anterior y que el pago total del quinto mes del año es de 793 presos, en la parte superior se especifica que el monto a pagar es por 2 mil 525 pesos.

La colocación de medidores

El negocio de Concesiones Integrantes se encuentra en el servicio medido, en el que hay seis estratos socioeconómicos con diferentes tarifas por metro cúbico, por lo que la empresa aprovechará para colocar medidores cuando se realicen las mejoras a las tuberías.

Dentro del recibo se advierte que provocarán molestias a los usuarios pues “realizaremos obras para cambiar las redes que ya cumplieron la edad de su vida útil, sustituiremos las tomas domesticas para garantizar la continuidad del servicio”, proceso en el que se prevé se instalarán los medidores.

Concesiones Integrales tiene un compromiso adicional a la contraprestación que pagó, en la que se establece que invertirán 3 mil 800 millones de pesos para rehabilitar la infraestructura pluvial de Puebla y la zona conurbada.