Con la firma de pasivos financieros por 9 mil 70 millones de pesos en apenas 3 años de gobierno, Rafael Moreno Valle ya igualó toda la deuda que Mario Marín Torres produjo en su sexenio y que al cierre de 2010 culminó en 9 mil 104 millones.

Los pasivos financieros se realizaron a través de Proyectos de Prestación de Servicios (PPS) que, de acuerdo a la Ley de Contabilidad Gubernamental que entró en vigor el 1 de enero de 2014, ya deben ser considerados como obligaciones financieras.

La cantidad de 9 mil 70 millones en pasivos es estimada, una vez que el gobierno estatal no ha hecho público el saldo total producido por siete Proyectos de Prestación de Servicios, ya que en la casi todos ellos recaen acuerdos de reserva de información pública, por lo que se desconocen montos exactos, tiempo de amortización y tasas de interés.

Los pasivos contratados a través de este esquema fueron utilizados para concretar obras como el Centro Integral de Servicios (CIS) con Grupo Técnico Constructor que destinó 3 mil 800 millones de pesos en la edificación a cambio de cobrar durante los 23 años y nueve meses próximos 161 millones de pesos, según consta en el Presupuestos de Egresos para 2014.

Los restantes ocho PPS firmados por el gobierno estatal se han utilizado para financiar la construcción de las plataformas para la armadora Audi en San José Chiapa, la rueda de la fortuna también llamada la Estrella de Puebla, el teleférico, el nuevo edificio de la Procuraduría General de Justicia (PGJ), parte de la autopista Cuapiaxtla-Cuacnopalan, además para la edificación del Museo Internacional Barroco que se concretará en este 2014 con un costo de mil 390 millones de peso, de los cuales 650 millones que corresponden al estado se realizará vía PPS.

Los 7 PPS que endeudaron a Puebla

Las obras que hasta el momento ya comprometen las finanzas del estado corresponde a los 3 mil 800 millones de pesos que Grupo Técnico Constructor gastó para la edificación del Centro Integral de Servicios (CIS), ubicado en la zona de Angelópolis. Durante 23 años y nueve meses los poblanos tendrán que ir cubriendo el endeudamiento de esta obra que el mandatario local ha calificado como una de las más grandes e importantes en lo que va de su gestión.

Según el contrato SINFRA-PPS-2011/001, que se filtró a medios de comunicación en febrero de 2013, el estado está obligado a erogar una cantidad anual de 161.1 millones de pesos (IVA incluido) durante el periodo pactado.

Un segundo proyecto concretado pero que aún no es totalmente de los poblanos es la rueda de observación, denominada por el gobierno como la Estrella de Puebla, que tuvo un costo de 400 millones de pesos a cargo de la compañía alemana Maurer German Wheels GmbH.

El gobierno local ha reservado información sobre el plazo para cubrir dicha cantidad, sin embargo de manera extraoficial se ha hablado de 25 años. Con los 30 pesos que se cobra por persona y con el pronóstico de un millón de visitantes al año, tendrían que pasar mínimo 13 años para recuperar la inversión.

Un tercer proyecto que comprometió Moreno Valle son las plataformas de la fábrica de autos de lujo Audi en el municipio de San José Chiapa, cuyo costo asciende a 2 mil millones de pesos por parte de Construcciones y Desarrollos Inmobiliarios Santa Fe (Codesa). El dinero se pagaría en los siguientes 25 años.

El nuevo edificio de la Procuraduría General de Justicia (PGJ), situado en el bulevar 5 de Mayo esquina con 31 Oriente, es la obra número cuatro financiado vía PPS por la empresa Edificaciones y Desarrollo de Ingeniería con un costo de 158 millones de pesos. Tampoco está claro a cuántos años se terminará de cubrir. Estaba prevista la entrega de las nuevas instalaciones en diciembre pasado, pero hasta la fecha no han sido inauguradas.

Y aunque la construcción de 63.66 kilómetros de la autopista Cuapiaxtla-Cuacnopalan se realiza de manera conjunta con el gobierno de Tlaxcala, Moreno Valle financió los 60.66 kilómetros que le corresponden vía PPS a través de la firma Edificaciones y Desarrollo de Ingeniería SA de CV, con quien pactó un gasto por mil 662 millones de pesos a pagar por 20 años.

Un sexto proyecto que ya está contratado, pero que se concretará durante este año, es la construcción del Museo Internacional Barroco que tendrá una inversión total de mil 390 millones de peso, de los cuales 650 millones le corresponden al estado y los financiará vía Proyectos de Prestación de Servicios, a pagar en 20 años. La empresa está por definirse.

El séptimo proyecto, que ha causado un verdadero dolor de cabeza al gobierno de Moreno Valle y que se proyecta a través de este mismo esquema es el teleférico. Está a cargo de AyPP Constructores, y aunque no se sabe durante qué tiempo las siguientes administraciones pagarán a la compañía, tendrán que ser 400 millones de pesos.

Recientemente el gobierno morenovallista se vio obligado a corregir la ruta con el fin de que no cruce la zona considerada patrimonio histórico como alegaron organizaciones civiles y el propio Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), por lo que su trazo será ahora del Centro Expositor al futuro estadio Cuauhtémoc VIP, zona que carece de cualquier atractivo turístico.

Moreno Valle endeuda igual que Marín, pero sólo en 3 años

A mitad de su sexenio, el panista ha firmado pasivos con empresas privadas para concretar al menos siete proyectos por 9 mil 70 millones de pesos, cantidad que supera 55 por ciento la deuda que dejó su antecesor si se toman en cuenta específicamente los 5 mil 850 millones de pesos que corresponden al estado, de los 9 mil 104.7 millones de pesos de deuda total que se tenía hasta el 15 de enero de 2011 cuando el hoy gobernador rindió protesta.

De acuerdo con la nueva Ley de Contabilidad Gubernamental aprobada a nivel federal en noviembre de 2012, y que entró en vigor el 1 enero de 2014, se considera como deuda y debe reflejarse en el rubro de pasivos de acuerdo al artículo 46, en su inciso I sobre información contable, en el que explica que las entidades federativas deben de reportar pasivos contingentes, junto con su estado financiero, además de explicar si la deuda solicitada es a corto o largo plazo “así como por su origen en interna y externa (…) fuentes de financiamiento, por moneda de contratación”, entre otras especificaciones.

Mientras que Marín en su sexenio dejó una deuda de 9 mil 104.7 millones de pesos, Moreno Valle en tan sólo tres años ha contratado casi la misma cantidad, comprometiendo las finanzas de la entidad en los próximos 25 años, lo que significa que los siguientes cinco gobernadores (incluyendo al minigobernador), tendrán que ir pagando a las empresas correspondientes una cantidad como parte del abono del dinero que destinaron para esos trabajos hasta concluir con el plazo convenido.

Con la nueva Ley de Contabilidad Gubernamental, Moreno Valle estará obligado a transparentar deuda directa e indirecta, además de las especificaciones, también debe de reportar el porqué se debe tal cantidad.

Tomando en cuenta el reporte que dio a conocer Hacienda hasta septiembre del 2013, Moreno Valle ha logrado reducir en lo que va de su gestión en 474 millones de pesos el saldo total de la deuda pública estatal respecto al cierre de 2011, el primer año de la administración, al pasar de 9 mil 318 a 8 mil 844 millones de pesos, lo que representa 5.1 por ciento, siendo en el rubro de municipios en donde se dio la mayor disminución.

Si únicamente tomamos en cuenta lo que debe el Poder Ejecutivo hasta septiembre de 2013 (5 mil 773 millones de pesos), en suma estaríamos hablando de una deuda de 14 mil 843 millones de pesos, que son las cantidades que tendría que reportar el gobierno estatal al federal.

Como parte de su segundo informe de labores en 2013, el secretario de Finanzas del estado, Roberto Moya Clemente, aceptó que el contrato de PPS es un pasivo que tendrán que cubrir las próximas administraciones gubernamentales como gasto corriente, tal como se hace con los sueldos y prestaciones de los empleados.

Insistió en que la ley no considera el PPS como deuda y tampoco se obliga a reportarlo como tal ante la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), esencialmente porque no se ha garantizado el pago con recursos del Fondo de Participaciones Federales, razón por la que hasta el año pasado no se reportó ante esa dependencia federal.

Eudoxio Morales Flores, académico especializado en finanzas públicas de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) ha señalado que aunque no se llama deuda, en la parte técnica —si se revisan estados financieros— un PPS sí es una deuda interna del estado que se debe pagar.

Sin contar endeudamiento para 17 ayuntamientos

Lo anterior sin contar la deuda que adquirirán 17 municipios para colocar alumbrado ecológico vía Proyectos para la Prestación de Servicios, cantidad que ascenderá a mil 4 millones 256 mil 209 pesos pagaderos a 10 años, que la mayoría de los diputados locales autorizaron en septiembre de 2013, a petición del Poder Ejecutivo.

PROYECTOS

• 
  Centro Integral de Servicios (CIS)


• 
  Museo Internacional Barroco


• 
  Estrella de Puebla


• 
  Plataformas Audi


• 
  Teleférico


• 
  Nuevo edificio PGJ


• 
  Autopista Cuapiaxtla–Cuacnopalan