La arquidiócesis de Los Ángeles dio por cerrado el caso del cura pederasta Nicolás Aguilar. Después de llegar a un acuerdo con las 11 víctimas, el cual consiste en indemnizar a los abusados sexualmente por el cura poblano con aproximadamente un millón de dólares, por lo que la Iglesia católica deberá destinar 13 millones de dólares, informaron los abogados.
De acuerdo al portal de internet Sin embargo, pese a que el acuerdo fue firmado el pasado viernes, ayer lo anunciaron los abogados de los afectados y lo confirmó la defensa.
De los 17 denunciantes, 11 aseguraron que Aguilar abusó de ellos, otras seis personas dicen que fueron violados por otros cuatro sacerdotes.
El sacerdote poblano desde hace 25 años está huyendo de las autoridades, aunque según las investigaciones, aseguran se refugia en México. El pasado 7 de septiembre de 2009, CAMBIO publicó que la Iglesia católica le retiró su investidura sacerdotal.
Desde 2005, esta casa editorial denunció el caso del sacerdote poblano que había sido denunciado por abuso sexual, sin embargo sólo fue perseguido por el delito de “ataques al pudor”.
El mexicano Nicolás Aguilar Rivera fue sacerdote visitante en varias parroquias de la diócesis de Los Ángeles durante aproximadamente nueve meses en 1987, tiempo en el cual las autoridades creen que abusó de cerca de dos docenas de niños.
Aguilar Rivera viajó a México en enero de 1988, poco antes de que las autoridades expidieran una orden de arresto en su contra por las denuncias de los supuestos abusos.
El pasado martes organizaciones civiles llevaron el caso del padre Nicolás a la ONU para exigir un castigo de los delitos cometidos.