El esfuerzo internacional y de Estados Unidos para responder a un supuesto atentado con armas químicas en Siria genera la pregunta: ¿por qué intervenir ahora en la guerra civil y no antes?
Más de 100,000 personas han muerto en el conflicto, que ha durado más de dos años. Ha habido masacres. Se han bombardeado áreas pobladas. Los estallidos han tenido como blanco a personas que hacen fila para obtener comida en panaderías. Ha habido decapitaciones. Millones de sirios han sido desplazados.
Sin embargo, un solo ataque espeluznante ha cruzado lo que el presidente Barack Obama ha definido como la “línea roja”. Los funcionarios rebeldes dicen que más de 1,300 personas, incluyendo a mujeres y niños, murieron recientemente como resultado de un atentado con armas químicas.
Estados Unidos cree que Siria fue el responsable; los rebeldes también culpan al gobierno de Siria. El régimen lo niega y algunos sirios han dicho a CNN que dudan que su gobierno haya utilizado armas químicas.
Si los ataques con armas convencionales, han dado por resultado una pérdida humana masiva, ¿qué hace que este ataque sea el punto decisivo para que el mundo actúe?
“Hacer estallar a la gente con explosivos es permisible, al igual que dispararles o torturarlos”, reclama Dominic Tierney, profesor de Ciencias Políticas en el Swarthmore College. “Pero, pobre del régimen sirio si piensa utilizar armas químicas”.