Con la posible contratación de hasta 800 millones de pesos el presidente municipal, Luis Banck Serrato se convertirá en el alcalde que mayor deuda heredará debido a que sus cinco antecesores cuando solicitaron préstamos no rebasaron los 382 millones de pesos, tope que impuso el panista Luis Paredes Moctezuma en la administración 2002–2005.

La deuda actual del municipio ronda los 477.4 millones de pesos –misma que al término de la gestión pudiera presentar una variación–, según constan datos del Congreso de la Unión y con la apertura de la línea de crédito por hasta 800 millones los pasivos se triplicarán alcanzando los mil 277 millones de pesos.

Lo anterior provocará que la deuda de Banck Serrato supere hasta en 42.5 por ciento la de 688 millones de pesos que dejó en su trienio Blanca Alcalá Ruíz a Eduardo Rivera Pérez.

Actualmente el municipio de Puebla con los 477 millones de pesos de deuda pública era la ciudad número 23 a nivel nacional con el mayor nivel de endeudamiento. A pesar de eso sus pasivos se encontraban por debajo de la que heredó Luis Paredes Moctezuma a Enrique Doger Guerrero, que fueron de 472 millones de pesos.

Contratación de deuda supera la de cuatro administraciones juntas

Con la apertura de la línea de crédito por hasta 800 millones de pesos, el alcalde Luis Banck contratará una deuda superior a la que solicitaron los cuatro presidentes que le antecedieron –Antonio Gali Fayad, Eduardo Rivera Pérez, Blanca Alcalá y Enrique Doger– quienes en suma contrataron 535 millones de pesos.

El día de ayer se dio a conocer que el Ayuntamiento de Puebla aprobó como tope de crédito 800 millones de pesos para realizar obras y adquirir equipamiento que abone al estado de fuerza con el que actualmente cuenta el municipio de Puebla. Cabe destacar la apertura de la línea de crédito se tendrá que pagar en un plazo máximo de siete años, por lo que requieren el aval del Congreso del Estado.

Al respecto, Gali Fayad no pidió un peso prestado, mientras que Rivera Pérez y Enrique Doger solicitaron 200 millones de pesos, cada uno –recurso que fue pagado en la misma administración– y durante el trienio de Blanca Alcalá 135 millones de pesos.

Mientras que en la administración 2002–2005 Luis Paredes contrató 382 millones de pesos, siendo ésto el máximo de deuda contratada hasta la administración anterior encabezada por Antonio Gali.

Cabe destacar que la última evaluación que realizó la calificadora Fitch Ratings al municipio de Puebla ratificó que las finanzas de la ciudad son estables. Sin embargo, las deudas actuales serán solventadas en un plazo de 15 años; es decir, vencen entre 2023 y 2025.