El mismo artista que pintó el rostro del “Góber precioso” en el mural del Salón de Protocolos, Fernando Rodríguez Lago lo borrará pues cumplirá una profecía que él mismo anticipó en el año 2000 cuando se lo dijo al entonces presidente municipal: “en esa época el licenciado me dio las gracias por haberlo pintado, yo le dije que no me agradeciera pues si se portaba mal, yo me encargaría de taparlo, y se le concedió”.

Junto con sus hijos Fernando y Josefina Rodríguez González, iniciaron ayer los trabajos para quitar el rostro de Mario Marín Torres, además modificarán el del ex secretario de Obras Públicas, Javier García Ramírez —quien se encuentra prófugo de la justicia por enriquecimiento ilícito— y serán sustituidos por el de dos mujeres en el mural que se encuentra en el Salón de Protocolos del palacio municipal.

Las modificaciones en el mural costarán de 22 a 26 mil pesos y serán realizadas por Fernando y Josefina, hijos del autor original de la obra, quien asistió para supervisarlos y afirmó que retrató al ex gobernador del estado por un impulso artístico y no por instrucción de Marín Torres.

Por su parte, su hijo Fernando explicó que en el proceso de modificación “primero vamos a copiar todas las figuras en papel albanene, después vamos a tener que tapar el rostro del licenciado Marín y del que está junto (García Ramírez) que se van a convertir en mujeres” esto después de concluir los bocetos a lápiz y a color que se realizarán en borrador.

Aclaró que las mujeres no son personajes conocidos, y su colocación obedece a la intención de resaltar la diversidad de género, pues los personajes femeninos conservarán los cascos de ingeniería civil que portaban los ex funcionarios.

La iniciativa de eliminar la imagen de Marín Torres fue propuesta desde el pasado mes de abril por el regidor perredista, Arturo Loyola bajo el argumento de que no era un personaje grato para la sociedad poblana, petición que fue aprobada por el resto del cuerpo edilicio y que se inició el día de ayer.