Le dan con todo a Micalco en sesión estatal del PAN
El bloque antimorenovallista se lanza contra el dirigente
Simpatizantes de Aguilar Coronado responsabilizaron a Rafael Micalco de los pésimos resultados electorales entregados este año y el mal manejo de recursos para la actualización de padrones
Miguel Ángel Cordero
La oposición al proyecto morenovallista aprovechó la sesión del consejo estatal del PAN para criticar el trabajo de Rafael Micalco Méndez al frente de la campaña electoral de 2009, en aspectos políticos y económicos, pero la mayoría de los 78 miembros de dicho órgano —formado por 96— rechazaron sumarse a las críticas promovidas por el senador Humberto Aguilar Coronado y su operador Carlos Ibáñez.
Los pesos-pesados de Acción Nacional se hicieron presentes en la sesión, incluida Ana Teresa Aranda. El único gran ausente fue el senador Rafael Moreno Valle, de quien se esperaba su presencia luego de obtener su calidad de miembro activo en el albiazul.
La mañana del sábado, el dirigente estatal del PAN enfrentó los reclamos de uno de los grupos del PAN. Los simpatizantes de Aguilar Coronado, quien busca la gubernatura poblana, acusaron a Micalco de los pésimos resultados electorales entregados este año y el mal manejo de recursos para la actualización de padrones.
Tratando de minimizar el reclamo que se hizo a puerta cerrada, el líder panista organizó una rueda de prensa en la que aseguró que el partido ha cerrado el capítulo de una de sus peores tragedias recientes: la derrota de 2009.
La sesión ocurrió a puerta cerrada, y aunque el Comité Directivo Estatal presentó a los medios de comunicación una versión matizada de lo ocurrido en el consejo, algunos integrantes de este organismo relataron a Cambio cómo ocurrió todo.
Los reclamos de pocos
Los dos reclamos del grupo de Aguilar Coronado fueron el aspecto económico y el político. Respecto al primero, Micalco Méndez no pudo informarle a los consejeros cuánto gana al mes por dirigir el destino del PAN en el estado. Tampoco pudo revelar el motivo por el cual Tecamachalco recibió más recursos durante la campaña electoral pasada. Esta demarcación se distingue por su morenovallismo. La versión oficial de la dirigencia fue que Acción Nacional se encuentra en números negros.
En segundo término, el dirigente estatal del PAN recibió cuestionamientos por parte de Aguilar e Ibáñez en torno a la “cerrazón” que manifestó durante el proceso pasado, ya que no escuchó las recomendaciones de los cuadros del partido. También fue criticado por la falta de actualización de los padrones de activos y adherentes, pues éstos no han sido depurados, a la fecha.
Pero el principal reclamo que enfrentó Micalco Méndez fue el de “obedecer ciegamente” las instrucciones del Comité Ejecutivo Nacional (CEN), pues al parecer de algunos consejeros el líder poblano “no tenía decisión”.
Sin embargo, las voces críticas no fueron más que las apáticas. Apenas dos personas lanzaron las acusaciones; “El Tigre” y su operador. Ana Teresa Aranda Orozco, “La Doña”, no se mostró tan incisiva y sólo respaldó algunas de las declaraciones de Humberto.
Incluso hubo inconformidades contra el senador, pues su insistencia de que Samuel Barrón Levet, Roberto Hochstrasser García, Raymundo Mata Contreras y Omar Coyopol Solís, emitieran sus opiniones respecto al proceso de 2009 fue considerada por algunos consejeros como un acto de protagonismo.
El pretexto de la dirigencia estatal de no dejar pasar a los ex candidatos de Teziutlán, Tepeaca, Ciudad Serdán y San Pedro Cholula estuvo fundamentado en que ya había ocurrido una reunión previa con los aspirantes perdedores y que no tenía sentido escuchar nuevamente los reclamos. Ante ello, los consejeros comentaron que la petición de Aguilar Coronado era parcial, dado que el PAN ya se había dividido en tres: los grupos que pelean por la gubernatura, el de Anatere, el de Humberto y el de Rafael Moreno Valle.
Pretextos de una derrota
Después de cinco horas, Rafael Micalco Méndez encaró a los medios de comunicación para presentar los resultados del consejo estatal. El líder estatal del PAN culpó a la designación tardía de los candidatos, la influenza, la crisis económica y el desvío de recursos estatales a favor del PRI, de la derrota del PAN en julio.
Reconoció, no obstante, que la centralización de las candidaturas desde la dirigencia nacional panista influyó para que Acción Nacional perdiera la totalidad de las 16 candidaturas a diputados federales. Ante ello, Micalco reconoció que el objetivo ahora es trabajar por la gubernatura en 2010.
Rechazó que hubiera traidores o seudopanistas, a pesar de que Bernardo Arrubarrena, dirigente municipal del blanquiazul, señaló la existencia de militantes con un falso compromiso con el partido.
Además, responsabilizó a la dirigencia nacional, encabezada entonces por Germán Martínez, de influir “demasiado” en los nombramientos de los aspirantes y, en consecuencia, el panismo en Puebla no tuvo demasiada capacidad para opinar y tener cuadros con mayor representatividad en todo el territorio local.
El líder panista agregó que las inconformidades fueron condensadas en un documento que será envidado a la dirigencia nacional para iniciar preparativos para la elección de 2010.
Micalco Méndez avaló los encuentros entre panistas e indicó que quienes aspiran a un cargo el próximo año pueden reunirse con quien quieran, siempre que eviten la descalificación o gestión del voto.
Y justamente ocurrió, pues Aguilar Coronado se reunió por la tarde del mismo sábado con mujeres panistas para analizar temas de su partido. Aunque portaba una camisa con la leyenda “Tigre, orgullosamente azul”, rechazó que su activismo político sea el inicio de una precampaña oficial. No obstante, la semana pasada tuvo acercamientos con panistas de Acatzingo, Mazapiltepec y Tehuacán y ya planea encuentros con activos y adherentes.
Fue para asistir a tal encuentro por lo cual Aguilar se retiró antes de que concluyera la sesión del Consejo Estatal y se negó a opinar sobre la ausencia de Moreno Valle a su primera actividad de partido, después de que fue admitido como militante activo.
La furia de Arrubarrena
Un conflicto no previsto por la dirigencia estatal del PAN y que explotó en plena sesión del consejo estatal fue la pelea por la sucesión en el Comité Directivo Municipal, que actualmente preside Bernardo Arrubarrena García.
El viernes pasado, entrevistado en Oro Noticias —que conduce Iván Mercado—, el panista denunció la existencia de un frente en su contra integrado por Luis Olmos, Eduardo Cobián y Blanca Jiménez, el cual es financiado por el PRI con la intención de desestabilizar al albiazul.
Al respecto, Rafael Micalco evitó hacer comentarios, aunque la molestia de Arrubarrena fue parte de la comidilla hecha por los consejeros en los pasillos del hotel Holyday Inn Finsa.
Luis Olmos exigió que el dirigente estatal le ponga nombre y apellido a sus acusaciones y precise quién de los panistas ha recibido dinero para desestabilizar al partido. Señaló que la estructura municipal tiene una incidencia de 30 por ciento en los resultados electorales y en la percepción del partido.
Más Luis Olmos no ha sido el único afectado en la carrera por la dirigencia municipal. En la sesión del sábado, los consejeros estatales le cerraron el paso a Genaro Ramírez Rojas, al suspenderle por seis meses sus derechos político-electorales como cargo a su “indisciplina”.
Llamado
Micalco Méndez “obedeció ciegamente” las instrucciones del Comité Ejecutivo Nacional (CEN), pues “no tenía decisión”, aseguran consejeros estatales del PAN
Llamado
Los pesos-pesados de Acción Nacional se hicieron presentes en la sesión, incluida Ana Teresa Aranda. El único gran ausente fue el senador Rafael Moreno Valle, de quien se esperaba su presencia luego de obtener su calidad de miembro activo en el albiazul.
NUMERALIA
78 consejeros ingresaron a la reunión
2 fueron los más críticos
4 excandidatos no pudieron hablar
3 fueron los acusados por Arrubarrena como sus opositores
5 horas duró la sesión a la que no asistió Moreno Valle
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